Michel Temer es señalado como informante de EU por Wikileaks

Wikileaks informó a través de su cuenta de Twitter, un cable donde afirman que el presidente interino de Brasil, Michel Temer, es o fue informante de la embajada de Estados Unidos.

Esto se dio a conocer gracias a una serie de telegramas clasificados como ‘sensibles y de uso oficial’, que fueron enviados el 11 de enero del 2006 y el 21 de junio del 2006.

En estos documentos, Temer compartió información acerca de la situación política del país sudamericano, que en ese momento se encontraba en elecciones, donde Lula Da Silva sería relegido.

Resumen: Michel Temer, presidente nacional del Partido de Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), cree que la desilusión de los ciudadanos con el presidente Lula y el Partido del Trabajo (PT) da una oportunidad para que el PMDB ponga a su candidato para las elecciones del 2016.

Sin embargo, las divisiones en el partido y la falta de opciones, podría forzar al PMDB ha aliarse con el partido de Lula o con la oposiciones PSDB.

Si los números de Lula no mejoran antes de las elecciones del PMDB en marzo, Temer dice que su partido aprobará la alianza con el PT o el PSDB, asumiendo que el candidato del PMDB no llegue a la segunda ronda.

Debido a su orientación centralista, el PMDB mantendrá el balance de votos entre las dos fuerzas opuestas. Seguramente se mantendrá como fuerza local y a nivel estatal. Temer cree que es su oportunidad de ganar 14 carreras gubernamentales.

En otro de los telegramas, Temer analizó las diferencias entre Lula Da Silva y Fernando Henrique Cardoso, así como la diferencia de votación en las clases sociales, donde afirma que Da Silva ‘robaba a los ricos para dárselo a los pobres’.

Otra información que reveló, es que esperaba ganar los puestos más importantes en el Senado y la Cámara de representantes, así ‘quien sea que gane la elección presidencial tendrá que venir con nosotros para aprobar cualquier cosa’.

Todo esto surge tan solo un día después de que Michel Temer asumiera la presidencia de manera temporal, después que el Senado aceptara el juicio político a Dilma Rousself, después de las acusaciones de corrupción, robo y las manifestaciones por todo Brasil.

Al parecer las cosas en Brasil serán aún más complicadas para el nuevo gobierno, quienes enfrentan varios retos en el sector económico y social, que han aumentado con el descontento de la gente en los últimos meses.