Loro arcoiris, un ave sociable no apta para principiantes
El loro arcoíris, caracterizada por sus plumas de vivos colores, es un ave muy sociable, cariñosa y juguetona, pero requiere cuidados permanentes y complejos, por lo que no es apta para personas con poco tiempo libre.
El loro arcoíris se caracteriza a nivel físico por el bonito abanico de colores de sus plumas: azul, rojo, verde y amarillo se combinan armónicamente, haciendo honor a su nombre. Su tamaño no es el de un ave demasiado grande, entre 20 y 30 centímetros, y no suele pesar más allá de 200 gramos. Sin embargo, necesitará un espacio amplio y bien acondicionado para vivir. No se encuentran variaciones en la fisonomía externa a nivel sexual, por lo que es complicado saber el sexo de este animal a no ser que lo haga un experto a través de una endoscopia o de una prueba de ADN.
Como dato curioso, Julián Sánchez Romo, responsable del departamento de aves exóticas de Zoo Aquarium de Madrid, señala que, al igual que el resto de loros, “tienen en la lengua una especie de filamentos, con los que recogen el néctar de las flores para alimentarse, ya que la base fundamental de su alimentación en libertad es el néctar”.
El Trichoglossus haematodus trepa muy fácilmente por las ramas gracias a un pico muy duro y resistente, generalmente de color rojizo o marrón oscuro y con forma de garfio, y a unas patas muy fuertes y ágiles; patas con una coloración grisácea acabadas en cuatro dedos: dos dedos delanteros y dos traseros que le permiten agarrarse con seguridad y firmeza. Unos ojos grandes y vivos en tono marrón completan los rasgos físicos que caracterizan al loro arcoíris.
Es un ave originaria de varias islas del Pacífico Sur, incluido el sudeste de Asia, la costa oriental australiana y Tasmania. Las zonas con mucha vegetación y húmedas son sus hábitats predilectos, ya que allí encuentran todo lo que necesitan, y lo hacen en nutridos grupos mixtos de hasta cincuenta individuos. ¿Y cuál es su esperanza de vida? Según explica a Webconsultas el especialista de Zoo Aquarium de Madrid, “en base a los estudios realizados tanto en libertad como en cautividad, la longevidad de los arcoíris es de unos 20 años aproximadamente”.
Comportamiento del loro arcoíris
En cuanto al comportamiento del loro arcoíris, Julián Sánchez destaca que esta especie de Loris, si es criada a papilla, “es muy noble y sociable como animal de compañía”. Advierte el experto que tenemos que tener en cuenta que las aves australianas son animales muy independientes “por lo que debemos marcar unas pautas de conducta adecuadas para que el arcoíris reaccione de manera positiva ante el juego con su amigo humano”. Por todo ello, este tipo de ave puede ser una compañera fantástica en hogares con niños.
Emiten sonidos similares a chillidos de alta intensidad y son grandes imitadores, en parte gracias a la morfología de su lengua carnosa, por lo que pueden llegar a repetir nuestras palabras. Eso sí, solo imitar, ya que aunque parezca que nos entienden, no son capaces de descifrar nuestro lenguaje.