El telescopio Euclid, que aspira a descifrar el misterio de la materia oscura, estrena sus primeras imágenes
Aunque aun nos quedan unos pocos meses para verlo funcionar a pleno rendimiento, acabamos de tener la oportunidad de contemplar las primeras instantáneas del telescopio espacial Euclid, que tiene ante sí una importante misión que cumplir: ayudar a desentrañar dos de los mayores misterios de nuestro universo, la existencia de la materia oscura y de la energía oscura.
Las dos primeras instantáneas del telescopio que acaba de dar a conocer la ESA tan solo son imágenes de prueba para comprobar que los instrumentos de Euclid funcionan como es debido. “Los fascinantes resultados indican que el telescopio espacial logrará los objetivos científicos para los que ha sido diseñado, y posiblemente mucho más”, afirmaba la agencia espacial en un comunicado.
El telescopio Euclid fue lanzado el pasado 1 de julio desde Cabo Cañaveral, Florida, y ha llegado hace poco a su destino final, el punto L2 de Lagrange, que se encuentra a un millón y medio de kilómetros de la Tierra. Desde ahí, el telescopio observará el universo y tomará imágenes a mucha resolución de miles de millones de galaxias.
El telescopio está compuesto de dos instrumentos científicos: una cámara de luz visible (VIS, por sus siglas en inglés) y un espectrómetro del infrarrojo cercano (NISP). Las imágenes del telescopio, que tiene 1,2 metros de diámetro, tendrán cuatro veces más resolución que la que ofrecen los telescopios terrestres, como explicaba la propia ESA.
Para qué servirá el telescopio Euclid
Según las estimaciones de los astrónomos, alrededor de dos tercios del cosmos (66%) está compuesto de energía oscura, y el tercio restante está compuesto de materia. La materia normal, todos esos planetas, estrellas y galaxias que hemos podido observar directamente, tan solo constituye un 5%, y todo esa materia restante que nos falta hasta completar el tercio es lo que conocemos como materia “oscura”, puesto que no podemos verla,aunque sí que podemos medir sus efectos gravitacionales.
El telescopio Euclid apuntará sus cámaras hacia galaxias distantes aprovechando que la luz se ve afectada por la materia oscura y hará un mapeado del cielo para observar cómo se distribuyen esas galaxias por el universo y cómo evolucionan, con la intención de desentrañar el papel que juegan la materia oscura y la energía oscura en todo ello.