¿Qué sucede si un candidato presidencial fallece, queda incapacitado o se retira de las elecciones en EE.UU.?
RT | A un mes de las elecciones presidenciales en EE.UU., uno de los candidatos principales y actual mandatario del país, Donald Trump, contrajo el coronavirus e incluso tuvo que ser ingresado en el hospital militar Walter Reed el pasado viernes. A pesar de que el político ya fue dado de alta y, según manifestó, «se siente mejor que hace 20 años», eso no significa que ya esté fuera del peligro. Como advirtió el principal epidemiólogo de EE.UU., el doctor Anthony Fauci, la condición del inquilino de la Casa Blanca aún puede empeorar en los próximos días.
Frente a estos hechos y debido a que el covid-19 es una enfermedad potencialmente mortal, a los votantes les puede surgir una pregunta muy lógica: ¿Qué pasaría si uno de los candidatos se retirara de las elecciones, quedara incapacitado o falleciera?
«Una confusión»
En julio de este año, la Corte Suprema de EE.UU. planteó un escenario hipotético lejano en el caso de la muerte de uno de los candidatos presidenciales semanas antes del día de las elecciones y determinó que tal circunstancia podría conducir a una «confusión». Al no encontrarle una solución a este posible problema, quedó como una aparente brecha en la ley electoral de EE.UU.
La 25.ª Enmienda de la Constitución sí deja claro que el vicepresidente Mike Pence intervendría como presidente en el caso de que Trump quedara incapacitado o falleciera mientras ocupa el cargo. En el mismo sentido, «la 20.ª Enmienda dice que el vicepresidente electo prestará juramento como presidente si el presidente electo muere antes del inicio de su mandato», recoge BuzzFeed.
Sin embargo, el documento no resuelve la duda sobre qué ocurriría si el candidato falleciera antes de que el Colegio Electoral se reuniera para designar oficialmente al presidente electo, lo que está programado para el 14 de diciembre. Normalmente, un candidato puede abandonar la carrera antes de las elecciones, pero debido a la pandemia las papeletas con los nombres de Donald Trump y Joe Biden ya fueron enviados a los votantes de varios estados de manera anticipada. Si el actual mandatario quedara eliminado, no está claro si sus votos pasarían automáticamente a Pence (o al candidato elegido por el Partido Republicano para tomar su lugar) o si los compromisarios podrían apoyar a otros candidatos.
Posibilidad de votar a otro candidato
En EE.UU. cada estado designa a compromisarios que participan en el Colegio Electoral en función de qué partido nominado gana el voto popular en su territorio y queda establecido por la Corte Suprema que los partidos políticos tienen el poder de exigir a los compromisarios que voten por el candidato que ganó el voto popular en su estado, en lugar de tener la libertad de elegir a otra persona.
Sin embargo, la Corte Suprema no dictaminó qué podrían hacer los compromisarios si un candidato muriera antes de que votara el Colegio Electoral. Por su parte, la jueza Elena Kagan mencionó que algunos estados, como California o Indiana, prometieron que, de darse tal caso, permitirían que los compromisarios actuaran con flexibilidad.
«Sospechamos que, en tal caso, los estados sin una disposición específica también liberarían a los compromisarios de su compromiso. Aun así, observamos que, debido a que no estamos ante esta situación, no se debe tomar esta opinión como que se permite a los estados vincular a los compromisarios con un candidato fallecido», manifestó Kagan.
Una gran «incertidumbre»
No obstante, el abogado Josh Harrow recientemente afirmó que, si la juez Kagan estaba equivocada en sus suposiciones, existiría una posibilidad real de que el problema esperara su resolución ante la Corte Suprema, y «tendría un tinte tan partidista que quién sabe qué podría pasar».
«¿Y si la mera ‘sospecha’ de la juez Kagan es incorrecta? ¿Qué pasa si Donald Trump gana inesperadamente en Colorado y luego fallece el 5 de noviembre, pero el gobernador del estado dice que no puede permitir que los compromisarios voten por otro candidato porque va en contra de la ley estatal?», cuestionó Harrow en su artículo.
Asimismo, el experto en leyes electorales Rick Hasen analizó las complicaciones que podrían surgir después de que la Casa Blanca anunciara el diagnóstico de Trump. El experto explicó que los legisladores estatales podrían señalar que, debido a que en el momento de su muerte ese candidato aún aparecía en la papeleta, los ciudadanos realmente no tenían otra opción.
«En resumen», concluyó Hasen, «habría mucha incertidumbre si nos enfrentáramos a una tragedia como la muerte o la incapacidad de un candidato presidencial durante este período».