Gertz libera a Collado

El abogado que divorció al expresidente Peña Nieto podría haber llegado a un acuerdo que busca golpear a Julio Scherer Ibarra, escribe Darío Celis.

JUAN COLLADO MOCELO está a un paso de irse a su casa, tras haber cumplido poco más de dos años y cinco meses en el Reclusorio Norte. Un acuerdo en lo oscurito lo tiene con un pie afuera.

Fue detenido la tarde del 9 de julio de 2019, cuando salía del restaurante Morton´s, sobre avenida Las Palmas, alcaldía de Álvaro Obregón, en la CdMx.

Abogado de personajes como Carlos y Raúl Salinas de Gortari, Diego Fernández de Cevallos, Carlos Romero Deschamps, Carlos Ahumada, Alejandro Gutiérrez y Mario Villanueva, fue el primer objetivo de la 4T.

El mismo que divorció a Enrique Peña Nieto y Angélica Rivera, fue acusado por el régimen de Andrés Manuel López Obrador de delincuencia organizada y operaciones con recursos de procedencia ilícita.

Sobre el afamado litigante pesan tres delitos: uno relacionado con las operaciones de Caja Libertad, otro por defraudación fiscal y uno más de presunto lavado de dinero por movimientos de una cuenta secreta en Andorra.

Elementos de la Fiscalía General de la República (FGR), que comanda Alejandro Gertz Manero, lo detuvieron luego de que un Juez de Distrito del Reclusorio Norte librara la orden de aprehensión.

En casi todo lo que lleva el gobierno de López Obrador, Collado Mocelo ya ve la luz al final del túnel: el mismo fiscal que lo encarceló y le imputó los delitos, le está ofreciendo la salida de prisión.

Mediante su operador, el Subprocurador Especializado en Investigación de Delitos Federales, Juan Ramos, Gertz le prometió la libertad, siempre y cuando denuncie penalmente a sus anteriores abogados.

La intención del fiscal, que esta semana escenificó un escandaloso pleito mediático con el ex Jefe de la Unidad de Inteligencia Financiera, Santiago Nieto, es golpear al ex Consejero Jurídico de la Presidencia, Julio Scherer Ibarra.

Hace aproximadamente mes y medio que el subprocurador Ramos citó en su oficina de la FGR al hermano de Juan, Antonio Collado Mocel, y a su hijo, Juan Collado Dot, para preparar la ruta de salida.

No había mucha ciencia: le quitamos a Juan las imputaciones, lo sacamos del penal y le dejamos su negocio: Libertad Servicios Financieros, siempre y cuando denuncie a quienes se acercaron originalmente a él.

El acuerdo fue aceptado: Collado denunció y se sabe que Gertz ya judicializó las carpetas de investigación. Pero el abogado de Salinas de Gortari y Peña Nieto pidió no salir directamente a la calle, porque teme que le ejecuten nuevas órdenes de aprehensión.

La petición al fiscal Gertz Manero fue cancelar la prisión preventiva oficiosa y permitirle seguir su proceso por los delitos que le fincaron desde su casa, argumentando afectaciones de salud derivadas de la diabetes que padece.

Y es que al abogado que custodia los secretos más sensibles y corruptos de los gobiernos priístas neoliberales, origen, según López Obrador, de todos los males que aquejan a México, podría ser detenido y procesado por el gobierno de Chihuahua.

Juan Collado va pagar alrededor de 200 millones de pesos para obtener inmediatamente su libertad y se comprometió a liquidar otros aproximadamente dos mil millones de pesos como parte de un acuerdo reparatorio por los dineros que transfirió de México a Andorra.

Pero en la mira del Fiscal General de la República el rezarcimiento del dinero no es lo más importante. Lo que en realidad le importa es jalar el hilo de una red para ajustar, otra vez, cuentas personales.

Adán Augusto López, Octavio Romero, Andrés Manuel López Beltrán, Javier May y Juan Antonio Ferrer (Especial)

EN EL CAMINO a la elección estatal, pero más la sucesión presidencial de 2024, la cohesión del Grupo Tabasco va a ser fundamental para un resultado que garantice la transexenalidad de la 4T y la integración del nuevo congreso. Analistas e integrantes de la 4T identifican a tres influyentes líderes del eje Tabasco-Chiapas que van a luchar por el control de las entidades del sureste e influir en la sucesión presidencial. Los rostros visibles son el secretario de Gobernación, Adán Augusto López; el director de Pemex, Octavio Romero; y el tercer grupo encabezado por los hijos del Presidente López Obrador: Andrés Manuel, José Ramón y Gonzalo López Beltrán. Alineados a Adán Augusto, los gobernadores de Tabasco y Chiapas, Carlos Manuel Merino y Rutilo Escandón. En él también participan Rosalinda López, Manuel Velasco Coello, Humberto Mayans, Abraham Alipi Mena y buena parte de los diputados y senadores de los estados del sureste. Este brazo político del Ejecutivo, a su vez, está muy cerca de los hijos del inquilino de Palacio Nacional y convive e interactúa pacíficamente. Los López Beltrán constituyen un grupo de interés, más que un grupo político, que se va a extinguir al final del sexenio y a quienes protegerán tanto por el titular de Gobernación como la Jefa de Gobierno de la CdMx, Claudia Sheinbaum. Otra ramificación del Grupo Tabasco está encabezado por el director de Pemex, Romero Oropeza, y funcionarios de primer nivel de la petrolera, empezando por el director corporativo de Administración, Marco Herrerías, quien maneja y opera los dineros de la empresa productiva del Estado, y el consejero independiente y ex cuñado del presidente, Eduardo Beltrán. Asimismo apunte al director del Centro Nacional de Inteligencia, Audomaro Martínez. Otros tabasqueños que también juegan son Javier May, el poderoso secretario del Bienestar, por la bolsa de recursos financieros que le encomendaron para los programas sociales de López Obrador. El acercamiento de May con el presidente se dio hace muchos años gracias a su padre, Juan Bosco, quien organizaba comunidades católicas de bases del PRD. Otro paisano igualmente relevante es el arqueólogo Juan Antonio Ferrer, el tóxico director del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi).

Claudia Sheinbaum (Especial)

FUE UN DESMARQUE muy sutil de Andrés Manuel López Obrador y un buen gesto a su alma mater. El año pasado, el segundo informe de gobierno de Claudia Sheinbaum tuvo como sede el Antiguo Palacio del Ayuntamiento y, el primero, el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris, ambos espacios del gobierno capitalino. En esta ocasión, el lugar elegido fue el Palacio de Minería, perteneciente a la “derechizada” UNAM, a decir del inquilino de Palacio Nacional. La Jefa de Gobierno fue recibida afectuosamente por el rector Enrique Graue. El informe de 2020 comenzó con un toque de silencio por los 18 mil fallecidos por Covid-19, hasta ese día, en la metrópoli. Esta vez no hubo toque ni un minuto de silencio, a pesar de que en un año más de 34 mil personas murieron por el virus solo en la capital. “Se acabó la frivolidad como forma de gobierno”, sentenció Sheinbaum, aludiendo a la administración de Miguel Ángel Mancera, cuyo coordinador de gabinete y entrañable, Julio Serna, acababa de ser aprehendido y vinculado a proceso por enriquecimiento ilícito. Pero también a tres salidas de su gabinete: en diciembre de 2019 fueron destituidos María Idalia Salgado, titular del Instituto de Verificación Administrativa (INVEA), y el consejero jurídico, Héctor Villegas, mientras que hace un cesó a su secretaria de Turismo, Paola Félix. Los tres por el mismo motivo: viajar en aviones privados.

POR CIERTO QUE 400 millones de pesos es lo que Claudia Sheinbaum solicitó al Congreso local para promover su imagen y la de su administración en 2022, año en que la disputa por la candidatura presidencial de Morena estará en su máximo nivel. Muy diferente de lo que otros aspirantes disponen: Relaciones Exteriores, que encabeza Marcelo Ebrard, contará con una muy módica cantidad de 6.2 millones, mientras que el Grupo Parlamentario de Morena en el Senado, que preside Ricardo Monreal, no tiene recursos en ese rubro. ¿Los 400 millones saldrán del impuesto que se busca cobrar a las Apps de reparto y mensajería? Que no digan que el piso está más disparejo que las calles de la ciudad.

Carlos Romero Deschamps (Especial)

EN LA SEMANA circuló entre el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana lo más parecido al videodestape de Ricardo Aldana como próximo secretario general de ese poderoso gremio. En cosa de días se llamará a elecciones y desde ya se perfila el priísta como el candidato de unidad que podrá garantizar la cohesión de esa organización que aglutina a más de 92 mil trabajadores divididos en 36 secciones sindicales. El gobierno de Andrés Manuel López Obrador, pero sobre todo la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, ve con buenos ojos a Aldana, porque sabe que asegura la institucionalidad del gremio, como lo garantizaba Carlos Romero Deschamps.

ESTOS SON LOS seis finalistas de la Coalición Juntos Haremos Historia que aparecerán en la encuesta para definir candidato que peleará la gubernatura de Hidalgo el próximo año: el diputado federal, Cuauhtémoc Ochoa; la diputada local, Lisset Marcelino Tovar; la diputada federal, Sandra Simey Olvera; el delegado de Programas del Bienestar, Abraham Mendoza; el diputado federal, Navor Alberto Rojas, y el senador Julio Menchaca. Se rumora que Ochoa es uno de los gallos fuertes del partido guinda, pues en las últimas semanas ha estado bajo los reflectores al convertirse en el primer legislador en defender la reforma eléctrica de Andrés Manuel López Obrador.