El que sigue, después de Carmona
Observatorio
Por Antonio Rosario
Pues sí, mucho mitote y desmadre para nada; sólo los aspirantes forrados en billetes de alta denominación.
Parte de ese método, de los candidatos de Morena y el PAN, es hablarpendejadas que tantos no entienden que son mentiras.
Y como sus expresiones carecen de sentido y compromiso sólo quedamos a la espera de que repitan las tragedias de 2010, cuando asesinaron a Rodolfo Torre Cantú.
Ya empezaron con Sergio Carmona.
La maldición continuará con uno de los principales y luego sentará en el poder a un gobernador como fue el corruptísimo Egidio Torre Cantú.
La fiesta no irá en paz porque la bronca ya está declarada entre panistas y morenistas.
Dicen que Américo Villarreal y “El Truco” irán a la final, y otros quitan a Villarreal y ponen a Maki acusada de traer las alforjas repletas de dinero. A Ismael nadie le ve posibilidad. Y Rodolfo González Valderrama no sufre tanto desgaste.
La condición de estos con todo y publicidad es que no aportan nada, que están idiotizados por el poder. Los oyen pero no confían en ellos.
Los acusan de que los gravísimos problemas sociales no le interesan, que son unos parlanchines atenidos a que la gente menos pensante es apaciguada por promesas, hipocresías y dádivas.
El desafío lo tiene la gente inteligente que no tendrá por quien votar.
El otro pueblo, la borregada, irá a las urnas a hacer lo que se le dijo.
El pueblo nunca aprende de sus experiencias dolorosas, y eso lo sabe el catálogo de candidatos de Morena y el PAN, y el residuo “político”, prometiendo que no volverán a robar a manos llenas.
Explota la risa sin ganas.
No hay un proceso democrático, sólo un hacinamiento de individuos que quieren el poder al precio que sea sin que los tamaulipecos los conozcan.
Son unos desconocidos, apoyados por poderes sin los cuales quedarían indefensos y desintegrados.
